El baile lo llevó a recorrer el mundo y vivió durante décadas en Nueva York. Julio Bocca y Paloma Herrera lo despidieron en sus redes.
El argentino Héctor Zaraspe, maestro de danza de varias generaciones de artistas, murió en Nueva York, a los 92 años. Fue docente en la prestigiosa Juilliard School y dio clases privadas a figuras como Rudolf Nureyev y Margot Fonteyn.
Zaraspe nació en Aguilares, Tucumán, el 4 de junio de 1930. A los ocho años se interesó por las danzas folclóricas y posteriormente la danza española. Gracias a una beca se formó también en ballet clásico en el Teatro Colón, con maestros como Otto Weber, Esmée Bulnes y Gema Castillo.
Estadías en España y Estados Unidos
En 1954 se radicó en Madrid, donde llevó adelante el proyecto del Liceo Coreográfico de Madrid. Dio clases a grandes bailarines españoles como Antonio Ruiz Soler, Antonio Gades, Luisillo y Luis Fuente, entre otros.
Un viaje junto a un ballet español lo llevó hasta Nueva York, en 1964, y tiempo después se incorporó como docente de la Juilliard School, ubicada en Lincoln Square, en pleno Manhattan. Fue presentado a Rudolf Nureyev y Margot Fonteyn, convirtiéndose en el maestro privado de la célebre pareja. Enseñó a otras celebridades del mundo de la danza como Olga Ferri, e impulsó la carrera de la joven Paloma Herrera.
Fue tan importante su legado en Juilliard que desde 1998 se otorga el Premio Zaraspe, a la labor coreográfica más sobresaliente. Allí trabajó durante 35 años y se jubiló.
Zaraspe también fue profesor del American Ballet Center e invitado del Instituto Superior de Arte del Teatro Colón. Fue instructor en el Metropolitan Opera, Teatro Colón, Hamburgo, Caracas y Ginebra. Presidió jurados internacionales de danza y seminarios en Argentina, Brasil y Venezuela. Creó el espectáculo Tango Passion, de gran éxito en todo el mundo
En 1989 recibió un premio Konex y desde 1993 creó en Tucumán la Fundación Zaraspe, que busca talentos artísticos entre los niños que asisten a los comedores y escuelas rurales dela provincia, gracias a un acuerdo inicial con Naciones Unidas, que le permitía llevarlos a Nueva York para su perfeccionamiento.
Sus últimos días
Su delicado estado de salud lo llevó a pasar algunos días internado en el Memorial Hospital de Nueva York, de donde recibió el alta a fines de enero de 2023. A las 23.43 del lunes 13 de febrero de 2023, falleció en su casa de Manhattan, Nueva York, a los 92 años de edad.
En las redes sociales fue recordado con cariño y admiración por Julio Bocca y Paloma Herrera.
Bocca escribió: “Su personalidad, su amor por el prójimo y la ayuda constante a la danza son parte del legado de este gran ser humano”.
Y Paloma Herrera lo recordó así: “Me vio en Buenos Aires y me dijo que si quería él organizaba para que me tomaran una audición, y a los 15 años entré en el School of American Ballet y mi vida cambió para siempre”.
MFB